La imagen que tengo conmueve por la belleza, por la suavidad de tu rostro.
Me invita a recorrerlo, a caer desde tus mejillas a los labios, rosados, tiernos, dulces.
A deslizarme en tu nariz y ser devorado, atravesando el portal tan blanco y filoso, hambriento, donde tu cálida lengua me recibirá plena, vibrante, sedienta.
Las palabras que brotan de nuestras bocas salen de las tripas, muy dentro guardadas, temerosas de ser presas de mandatos, anhelante de tiempos nuevos que el temor no deja.
Te invito a ser hoy, a disfrutar del hoy, a poner una semilla hoy en nuestras manos y que el abono sea el amor, sea nuestra savia quien nutra esa planta que formara raíces, que ascenderá por nuestros brazos, recorrerá nuestros pechos y descenderá por nuestras piernas hasta anclarnos en simiente.
El amor en tus ojos no necesita palabras, las lagrimas que brotan tampoco necesita sendero.
Esta noche te amo mas que nunca, esta noche somos mas que nunca.

